El baile y la danza son herramientas excelentes para desarrollar destrezas sociales en los niños. Mediante esta actividad creativa, los pequeños aprenden a trabajar en grupo y en pareja, a escuchar y a ser receptivos a las demás personas, a respetar el espacio de otras personas y a compartir el espacio en una comunidad. Este crecimiento social, por supuesto, no sucede de la noche a la mañana.
Los niños de 5 y 6 años de edad necesitan empezar este proceso de aprendizaje de una manera gradual y divertida. A esa edad la mejor forma de exponerlos a estos beneficios del baile es mediante juegos de danza creativa. A continuación comparto 3 juegos sencillos que ayudan a desarrollar las destrezas sociales en los niños a una temprana edad. Practica estas actividades en tu casa con un grupo, y empieza a cultivar en ellos el amor por el baile y la danza.
1. Sigue al líder
Este juego ayuda a los niños a desarrollar la habilidad de bailar en el espacio con otras personas de una manera armoniosa. Les ayuda a cultivar destrezas sociales y a mejorar la capacidad de trabajar en equipo y de mantener un buen nivel de concentración trabajar en equipo.
Invita a los niños a que escojan una pareja y a que decidan cuál de ellos hará el papel del líder. Explica que cada uno tendrá la oportunidad de hacer el papel del líder, porque los roles se cambiarán después de varias rondas.
Pon música divertida. Pídele a los líderes que empiecen a moverse a su gusto sin tocar a sus parejas. Diles a las parejas que sigan al líder imitando todos sus movimientos.
Recuérdales a los líderes que hagan movimientos que su pareja pueda copiar con facilidad.
Recuérdales a los líderes que hagan movimientos que su pareja pueda copiar con facilidad.
Apaga la música. Pídeles a los niños que cambien de rol. Pon la música otra vez y anima a los nuevos líderes a que empiecen a moverse a su gusto.
Repite esta misma actividad varias veces. Después de que trabajen con su pareja un par de veces, invítalos a que busquen otra pareja.
Repite esta misma actividad varias veces. Después de que trabajen con su pareja un par de veces, invítalos a que busquen otra pareja.
Al final del juego, saca tiempo para reflexionar acerca de la experiencia. Pregúntales:
- ¿Qué rol te ha gustado más y por qué?
- ¿Cuál rol se te hizo más fácil?
- ¿Qué aprendiste acerca de bailar con otra persona?
2. El espejo y la sombra
Este juego es excelente para que los niños empiecen a desarrollar destrezas cinéticas más avanzadas. En esta actividad los niños trabajan en tríos: el bailarín A es el líder, el bailarín B sigue e imita al líder y el bailarín C es la sombra del bailarín B.
Explica los tres roles del juego. Divide el grupo en tríos y pídeles que escojan su rol.
El bailarín B se coloca frente al bailarín A, y el bailarín C se coloca detrás del bailarín B.
Pon música instrumental de tempo lento. Invita a los lideres a que empiecen a mover una parte de sus cuerpo a un tempo lento. Diles a los bailarines B que sigan e imiten a los líderes, y a los bailarines C a que se muevan detrás de los bailarines B como si fueran su sombra.
Recuérdales a los líderes que hagan movimientos que todos los demás puedan seguir de una manera fácil. También diles que se mantengan concentrados en el espacio personal de cada uno, y en los espacios que ocupan cada trio dentro del espacio general
Detén la música y pídeles que cambien de rol. Repite varias veces hasta que todos hayan tenido la oportunidad de ser líderes, seguidores y sombras.
Al final, conversa con ellos acerca de la experiencia. Pregúntales que diferencias observaron al jugar cada rol.
3. Esculturas en conexión
Este juego ayuda a los niños a cultivar la habilidad de bailar con una pareja manteniendo la concentración en acciones distintas. En esta actividad cada bailarín en la pareja realiza una acción diferente al unísono y se mueven en trayectorias distintas dentro del espacio.
Pídeles a los niños que escojan una pareja.
El bailarín A hace una escultura y se mantiene en una expresión congelada. El bailarín baila a su alrededor durante un tiempo determinado. Puedes marcar el tiempo contando en voz alta o usando algún instrumento de percusión.
Cuando termine el tiempo determinado el bailarín se coloca frente al bailarín A. Ambos hacen contacto con una parte del cuerpo y hacen una nueva escultura. Congelan la expresión durante 3 segundos.
El bailarín A se remueve de la escultura fluidamente y empieza a moverse alrededor del bailarín B (que mantiene en una expresión congelada).
Recuérdales que hagan los cambios de roles de una manera fluida y concentrada.
Después que cada uno en la pareja haya jugado ambos roles, invítalos a que cambien de pareja.
Autora: Corazon Tierra
Fuente original: http://baile.about.com
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